miércoles, 26 de diciembre de 2012

Quizás VIVIR.


Nadie nos dijo que fueramos.
Nadie nos dijo que lo intentaramos.
Nadie nos dijo que fuera facil.

Alguien dijo que somos nuestros sueños que si no soñamos estamos Muertos.
Nuestros pasos siguen al instínto que nos llevan a lo desconocido, No miramos los obstaculos que hemos superado, sino aquellos que vamos a superar.
No se trata de ser los más rápidos, los más fuertes o los más grandes.
Se trata de SER nosotros mismos.

No somos Corredores, ni nadadores, ni ciclistas,
Tan solo deportistas, somos personas.

No estamos seguro de conseguirlo, pero estamos convencidos de conquistar la felicidad
                                                 Que buscamos,, Quizás?....... ¡¡VIVIR.¡¡

jueves, 22 de noviembre de 2012

Cuando Corres y se te va de las manos.

 Correr engancha, así de simple, se pasan monos, se tienen subidones y te lleva a ser un esclavo. Lo podemos adornar, maquillar, hacerlo poético o incluso épico, pero somos simples drogadictos. Al igual que a mucha gente se le va de las manos el alcohol, las drogas o el juego, a tí se te puede ir de las manos el correr, porque a mi me pasó.


                                  



A correr se empieza como con cualquier otro vicio, lo pruebas y sabes que eso no es para tí, tu cuerpo lo rechaza, te imaginabas otra cosa, y no lo vuelves a probar..........o por el contrario, le coges el gustillo, repites varias veces, y cuando te vienes a dar cuenta, te ves a ti mismo mirando zapatillas frente a un escaparate.
Al principio pasa como con las hemorroides, se sufre en silencio, en soledad, eres un yonki, pero no se te nota mucho. Mientras otros hablan del partido de ayer, tu juegas con la taza de café y piensas en aquella cuesta de tal Montaña, y te sube un poco el pulso cuando decides que esa misma tarde probaras a subirla un par de veces a un ritmo acelerado.

Tu pareja nota algo, hay indicios sospechosos en tu nueva actitud hacia las visitas a los centros comerciales. Ahora de repente aceptas acompañarla a mirarse unos zapatos, y no sabe que, en realidad, tu mente está puesta en la tienda de deportes. Caminas junto a ella, haces como que la escuchas, pero te sudan las manos conforme avanzas por la galería. De repente te haces el sorprendido y exclamas: "mira, que casualidad.....ya que estamos aquí voy a echar un vistazo........pero solo por mirar". Como cualquier drogadicto, has comenzado a mentir a tus seres queridos, eres ruín y mezquino. 
El dinero te quema en las manos, tienes que saciar tu ansia.........ya no sabes que excusa dar para comprar otro nuevo par de zapatillas........y empiezas a tambalear la mensualidad.

Entras en la fase de grupo. Cual alcohólico de callejón, quedas con tus homólogos en aquel arbol del barranco, cada día a la misma hora, y juntos apurais unas dosis de sudor y ácido láctico. Y no dejas de mentir, sales de casa diciendo en voz alta: "voy a correr una horita" y al final te pegas tres.
Miles de hombres buscando en internet los videos marranos de Lucía Lapiedra, y tu ojeando el blog de Ser13gio o las ofertas de Wiggle, mientras eres sorprendido por tu señora que te recrimina: "¡¡otra vez ahí metido!!", y te trabas al hablar buscando una explicación, como un niño al que pillan robando en un supermercado.
Cuando el porro ya no es suficiente se pasa a drogas mayores. Ahora ya solo entiendes de Ultras, entrenos brutales para carreras brutales. Miles de metros de desnivel, grados centígrados que secan o hielan.......del 100km a las 100 millas, de lo improbable a lo imposible......del avituallamiento a la autosuficiencia. Enganchado hasta las cejas, caido en un pozo sin fondo, ya no hay luz al final del tunel.
Ya no tienes identidad, ahora eres "ese que corre", y la gente se rie de tí. Correr se te ha ido de las manos. Te ves saliendo de la cama, intentando no hacer ruido, un sabado de madrugada. La lluvia golpea las ventanas, empujada por el fuerte viento, mientras el destello de un relámpago recorta tu figura en la pared. Te asomas a mirar la calle y piensas: "¡jodeeeerrr!", mientras en tu reloj dan las 5:00h. Solo un adicto terminal haría lo que tu estas a punto de hacer, salir a por una dosis en una madrugada de perros.
Luchas contra el viento para abrir el portal, y en cuanto sales, la lluvia horizontal te acribilla hasta los ojos. Con dificultad pones en marcha el cronómetro, y comienza el movimiento. Corres bastante inclinado, peleando con el dios Eolo. Te sale una risa nerviosa, se transforma en carcajada, gritas "Woooooooo!!!", el agua chorrea por tu pelo, por tu cara......te estas quedando colgado.
Cuatro horas mas tarde regresas a casa. Parado en la puerta miras hacia abajo, a tu alrededor se está formando un pequeño charco. Toda tu ropa gotea, mas allá de las rodillas todo es barro, y de tu espalda y tu cabeza emergen nubes de vapor. Mientras los tuyos aún duermen, piensas :"que ha sido de mi!!" , caminas de puntillas hacia el cuarto de baño, dejando tu rastro por todo el salón, y te metes vestido en la ducha. Has tocado fondo.
Dicen por ahí que se puede salir, que se puede dejar esta droga, incluso hay quien comenta que conoce a uno que un día también estuvo así, y que ya lo ha superado. Yo no me veo capaz, ya se que soy un cobarde, pero una vez estuve dos meses sin correr debido a una accidente y esos días  fueron terribles, me sentía nervioso e irritable.......no lo quiero repetir, me tuve que agarrar a la Paciencia ya que era el camino más rápido a la recuperación.
Lo único que me anima un poco a seguir adelante es saber que estas ahí, que no soy el único, que no estoy solo.
Si correr se te fué de las manos quizas estes leyendo esto, así que ánimo amigo, hay mas gente pasando por lo mismo que tu.
Quizas, cualquier día de estos, nos veamos cara a cara con un numero en el pecho, como vulgares delincuentes, y corramos juntos compartiendo esta adicción.


sábado, 27 de octubre de 2012

DE MENOS A MÁS...!. Mi carrera en la UTGC 2012


“Vale más ser el último en la Aldea, que NO llegar a Melenara”, frase que repetía Jesús Mato durante la carrera


SALIDA DE GUAYADEQUE
Bueno…, afronto la carrera UTGC 154 km con mi sobrino Jonathan, formando el equipo VANDAMA X-TRAIL, tras muchos meses de preparación y entrenamientos duros y grandes sacrificios, llega el día esperado de la carrera, ese día nos cae como una losa 05:30 de la madrugada: me recoge mi hermano Jerónimo y tras cambiar impresiones llegamos a Melenara, con las reservas cargadas de adrenalina, aunque contento ya que no tengo esos nervios que tenía antes de una carrera (si es que parecía la víspera de Reyes),parece que he aprendido a controlar esos nervios.

 Al llegar, empiezo a ver corredores y voluntarios en el recinto de Melenara.  Buenos días a todos y a la guagua, que nos lleva a la salida de meta en el Barranco de Guayadeque, salida puntual a las 07:00 de la mañana, nos ponemos en posición y entre fotos, risas y el buen ambiente que se respiraba había momentos de silencio entre los corredores, no sé, no sé, algo se cocía (ja, ja, ja) 3, 2, 1… la voz de mi amigo Antonio se oía en el Barranco como un volador !

Con paso firme ascendemos los primeros kilómetros con una buena subía vertical al principio, vamos delante un grupo de unos 8 a 10 corredores, entre ellos, Jonathan, Fran Godoy y servidor, como socios de nuestra nueva empresa que se llama “con destino la Aldea”, eso fue en un principio lo acordado. Tras 6 km. empezamos a aprovechar los llanitos y las bajadas para trotar, llevamos buen ritmo, bajando a Santa Lucía nos comienza a amanecer y así que fuera frontales. Ya en Santa Lucía unos corredores toman la iniciativa de tirar del grupo y romper la armonía que se traía, la “empresa” empieza a comentar sobre estrategias a seguir ya que el grupo se divide en tres con nosotros en medio

TUNTE
Sin apurarnos pasamos Rociana, por cierto precioso palmeral y lugar, nos encontramos a la salida a nuestro compañero Roberto y Josué Cheche con risas, saludos y sin parar cogemos la subida de Santiago que nos llevaría a San Bartolomé, primer avituallamiento en la plaza, allí se encontraba Bruno, Noelia, Alberto y Victoria, que van siguiendo la carrera cámara a cuesta, la gente del pueblo desayunando en las terrazas nos miran con cara de admiración, reponemos agua y poco más, y en esto aparece Samuel Arroyo y su fiel compañero Javier, esperamos por ellos y salimos juntos, la “empresa” crece, ahora somos 5. A buen paso empezamos a subir a Cruz Grande, durante unos Km. vamos compartiendo conversaciones de experiencia de otras carreras y vivencias sobre todo Samuel y Javi con un grandísimo curriculum (…que grande son). 



En esto echamos para atrás la subida y al final sorpresa, Alberto Megido y Vic nos sacan una foto y sin detenernos mucho giramos hacia el camino que nos llevaría a la primera de las Presas, Chira, tramo muy bueno para trotar y así fue, unas partes de toboganes y a ..bajar. El Sol va haciendo acto de presencia, la empresa va funcionando e íbamos a gusto los cinco ya pensando en el avituallamiento de Soria, donde según nos dijo la Organización habría paella, aunque no llevaba mucha hambre, iba mentalizándome en comérmela, entraba en la estrategia lógica. La bajada a Soria es un terreno técnico y con muchas piedras sueltas, bajar sin bastones seguro nos llevaría más de una vez el culo al suelo, así que a desplegar bastones, los saco de la mochila y para abajo. Llegamos a Soria, avituallamiento, en ese momento tres corredores salían, entre ellos el futuro ganador, José Israel, fue la última vez que lo vi en carrera, un crack…


AVITUALLAMIENTO DE LA PRESA DE SORIA
Ahí estaban mi hermano, Marta, Mónica (la chica de Mikel) y Antonio Lobo
Llegamos aquí con un ritmo para mí algo alto, se lo iba comentando a Jon y Fran, durante la bajada, el Sol estaba pegando fuerte. En lo que nos avituallábamos hacíamos estrategia y seguía convencido que había que bajar el ritmo. En el clima se respiraba un ambiente de euforia, comiendo a la vez que nos recargaban las mochilas y los camelback, mientras, le dábamos cuenta a una rica paella,… las cosas de Antonio. Nos mirábamos unos a otros como si de una partida de póker se tratara, nos secábamos el sudor que íbamos empapados. A la paella le sigue un plátano y dos trozos de sandia fresquita, casi ná con la sandia, …más núnca !!, ja,ja,ja. (..me sentó fatal)



12:30 del mediodía, un Sol abrazador, salimos los cinco más calmados y caminando para hacer la digestión, un furgón a lo lejos tocando la pita, Bruno de nuevo:.. Que pasa, a caminar a Triana, venga a correr, nos grita…!. Seguimos unos Km así, todos menos yo, trabajan más rápido la digestión, e intentan subir el ritmo, así fue, pero yo no me encontraba bien. Ya en el barranquillo, empiezo de nuevo a sudar mucho, un sudor frío y a subir las pulsaciones, no las controlaba, tenía que parar, se me disparaban, había que parar unos segundos, para que bajara a su sitio, en eso Samuel y Javi nos dejaban atrás, Jon y Fran me acompañaban y en unos minutos más sin dudarlo y sin pensarlo le decimos a Fran, que tire, que ya lo cogeremos, se rompe la sociedad con Fran, pero el equipo sigue

Yo estoy pasando un momento malo, JONI me dice e insiste en la hidratación, era vital, así hice, me encontraba pesado pero con unas cuantas paradas subimos a la Presa del perro, para afrontar la siguiente y larga subida a la Montaña de Tauro. Bueno, mi primer bache, (…me pasaba por mis pensamientos) subimos a duras penas al final de la subida le comento a JONI que teníamos que parar y bajar pulsaciones y calmar el cuerpo, bufff, bufff, subiendo un aire fresco corría de vez en cuando, aparece alguna nube pero no era suficiente, seguía habiendo calor. Camino a la Degollada de las Lapas, que por cierto, la planta más alta te llegaba al tobillo, todo estaba muy seco y aquí, en la nada, donde no hay ni lagartos, nos cruzamos con una pareja de “guiris”, iban haciendo senderismo, ..jó, que locos con una  botella de agua de litro y medio, hello…!, le decimos y nos contesta, hello…


Ahora toca trotar toda una bajada larga, muy empedrada, como cuchillas, si te caes te quedas pegáo. Me estoy parando poco a orinar, pienso, sigo hidratándome a tope, llegamos al principio de las Lapas, al fondo, abajo, Mogán, bajada muy técnica y jodida, ya sabíamos que nos iba a cargar, así que sacamos de nuevo los palos para aliviar algo la bajada, suavemente nos dejamos caer, oímos unos silbidos de fondo y gritos de “indio de guerra” pero muy abajo del todo, todavía nos faltaba mucho para llegar, ya yo sabía por el silbo y las “cencerradas” quienes eran, Jony me pregunta y le digo a sabiendas quienes son: unos amantes y acompañantes incondicionales de las carreras de montaña, nuestros amigos Victor el “compa” y su mujer Teri (…que buena gente).

MOGÁN. EL MOLINO
Al final nos esperaba un avituallamiento fresco, de líquido y fruta, dirigido por un veterano compañero, Antonio Vega, llego con mala cara, fatigado y harto de tomar mucho líquido, me refresco todo lo que puedo, había agua con gas, que la echaba de menos después del almuerzo, seguro que si hubiera salido de Soria con ella hubiese hecho mejor la digestión, tomo pero nada, sigo con una gran pesadez, pero pa lante , me decía a mí mismo y todos, el compa sale y me aconseja que un pie al lado del otro y así fue, nuestro próximo destino las casas de Veneguera, pero primero había que subir unos 2 Km. de fatiga y sol. No sabía cuando iba a mejorar, pero mantenía mi mente en blanco y pensando en positivo, sabía que tarde o temprano en algún momento iba a mejorar, lo que no sabía es que iba a hacer a 0 Km. de la Aldea, entramos en Veneguera y le pido a Joni que pare a descansar, me daba cosa verlo aguantar mi ritmo bajo, el podía dar más , pero el equipo es el equipo, decidimos sentarnos y descansar en la parada de la guagua, donde estuvimos unos diez minutos, pero que vá, seguía igual , no me sentía bien y empezaba a caer la tarde, pero pensábamos y comentábamos en la parte positiva, que era, que íbamos hacia Tasarte con sombra.


El sol caía lentamente detrás de las montañas de la Aldea, mientras tanto nos encomendamos al sendero que nos llevaría al Salto del pastor, para luego caer a Tasarte, un camino de falsas subidas llevadero hasta su último Km. un poco serpenteante y fuerte pero se sube lento, logramos llegar al Salto del Pastor, y allí avituallamiento líquido donde lo comandaba mi gran amigo Alexis con Nuria y Paulita, estuvimos unos 15 min., a ver si mi cuerpo cogía tino, mientras, le iba comentando lo que me estaba pasando, no llevaba buena cara. Me animaban, mientras la amistad me detenía y mi sobrino sentando al pie del sendero me miraba y me esperaba para continuar, lo veía con ganas , yo quería pero no podía, necesitaba ganar más tiempo, pero al ver su carita saqué fuerzas de donde no las tenía para no defraudarle, ya le estaba haciendo pasar mucho así que me animé y me levanté de aquella estupenda silla con sombrilla incluida y a… “trotar, se dijo”.


Salí un poco recuperado, pero nada, al rato seguía con malestar, más agua, más sales, ya no sabía qué hacer e  íbamos sumando km. más km., la tarde caía cada vez más rápida y eso me favorecía me iba refrescando el cuerpo, bajamos un poquito ligero y no hablábamos mucho. JONY me recomendaba no hablar para no gastar, me decía bebe agua, ahora sales y no me dejaba que callera en el olvido, malditas las ganas parecía un sapo: croack, croack, croack….. en esto, después de unos Kms. de subida, por fin el mirador de… LA ALDEA, ÑOOSSS.. LA VEO, POR FÍN.

LA ALDEA
Ahora nos toca unos 40 m. de alquitrán y las balizas nos manda a entrar en un sendero de bajada, que lógicamente nos llevaría a el Hoyo de la Aldea, al entrar en ella bebo sales y me “provoco” y mando parar a Jony, me agacho y me agarro la rodilla y PUUUUM, vomito un buen rato, Jony a 20 m.. Observa, yo lo veo pero sigo de rodillas en el suelo, en esto me levanto y grito: ¡DIOS POR FÍN!, y grito,.. Jony estoy bien, que bien me siento, ahora sí, le decía vamos y lo adelanto se asombra y entonces se viene arriba, empezamos a coger ritmo y confianza el equipo empieza a funcionar otra vez, bajamos por un sendero no muy bueno para correr, hasta que saltamos al Hoyo, donde se encontraba el avituallamiento de Antonio Vega, con líquido iba bien de agua así que no nos detuvimos mucho y con ganas de llegar al pabellón de deportes de la Aldea. Unos dos Km. de barranco, que por cierto en él nos cae la noche, y tuvimos que montar de nuevo los frontales y así llegamos al pabellón.

Que barranco más jodío con callaos y sus piedras sueltas nos muele un poco más, pero nada, entramos en el pabellón, nos recibe Noelia y nos manda a la planta alta, la zona VIP, allí Bruno me recomienda el “físio” Javier que es my bueno y así lo comprobé, sorprendiéndome con varias cosas (iré a su consulta seguro) . Bueno yo tenía muchas ganas de echarme sólo pensaba en ello mi sobrino mientras tanto más entero se va a duchar, me percato y hago igual a duras penas, ya en el vestuario empiezo a vomitar y mucho, Jony me miraba y le leía en sus ojos lo que pensaba ( este tío no sale de aquí ni loco) mientras yo echaba hasta las entrañas, los berridos se oían hasta donde estaban el resto de los corredores. Bruno llega y me dice que si me estaban matando ja, ja, ja… se ríe, sólo pensaba en recuperarme pero lo veía difícil sólo quería descansar. Bruno me aconseja que tome caldo y acepto, me tomo tres  vasitos del caldo de Chicha, a duras penas en esto aprovecho y me voy vistiendo por si se da el caso y puedo salir

 
Le pregunto a Jony su opinión sobre mi situación y me contesta que esa decisión está en mis manos, pero que piense lo que me quedaba, yo lo sabía y era cierto pero mi cabeza me decía: ARTENARA, ARTENARA, lento pero ARTENARA, me invaden los pensamientos pienso en todo en pocos minutos, tomo la decisión de seguir no sabía si para bien o para mal, pero me levanto recargo agua y salgo todos me dan ánimos y emprendemos la subida, al final estuvimos una hora y media en la Aldea, comenzamos la subida larga de 20 Kms. hasta ARTENARA. Comenzamos muy lentamente mientras empezaba a comer y a beber muy regularmente llevamos un rato subiendo y no paramos desde el principio, Jony me deja ir delante para que no me agobie y me subiera la autoestima, …el bueno de Jony, mi sobrino del alma

Noche plácida un poco oscura y alguna ráfaga de viento nos acompaña pero estaba bien, miro el reloj las 12 y cinco de la noche, miro hacia abajo y veo las luces de la carrera de 83 km. que acababa de salir muy lejos pero avanzaban muy rápido parecían una jauría de “lobos hambrientos” ja, ja, ja. En esto empiezo a distanciarme de Jony, que raro, me digo y espero  y así durante algún tiempo pensaba que lo que estaba haciendo era para motivarme, pero mosqueado le pregunto qué tal vas? Y me contesta que no va muy a gusto , me digo (..Jony está pasando un mal momento pero sé que se recuperará llegó sobradísimo a la Aldea, a esto la jauría se acercaba , Jony me comenta que quiere descansar, yo conocedor del terreno lo sorprendo, al lado del sendero se encontraba  una choza de cazadores, que yo en otros entrenamientos me había cobijado del sol y en busca de agua, pues nos metimos y cogimos unos colchones viejos que allí tenían los cazadores, fuera mochilas, frontales y ponemos el despertador para 50 minutos de sueño. Jony tranca el sueño enseguida, yo  oía a lo lejos voces conocidas, creo recordar Roland, Sandra, Gregorio y a Juan Miguel casi ná. Empiezan a pasar luces y nosotros allí “quietitos” yo oía llover, que raro, en esto pasa el tiempo y despierto a Jony y le comento que caían gotas , nos preparamos y salimos de la choza, vemos corredores y nos acoplamos a ellos, era casi la cola de la jauría, sorprendemos por el camino a algunos compañeros, Miguel, Ariel y alguno más que no recuerdo, Jony va lento no va bien y queríamos llegar cuanto antes a Artenara. Al final el ruido de la lluvia no era tal sino que roedores, Spirit González seguro

ARTENARA
El suelo no estaba mojado, nos adelantan todos, me siento y espero que Jony me de caza, con más tiempo del que pensábamos llegamos a la Degollada del Sargento. Pero era lo de esperar, eran las tres o las cuatro de la madrugada un par de subidas y bajadas y al final la subida al helipuerto de Artenara, nos acercábamos al avituallamiento, tenemos sueño y frio. Unos kilómetros antes, Jony me decía que a lo mejor abandonaba en Artenara, yo le digo que tranqui que allí recuperábamos y ya veríamos. Al llegar nos encontramos a Jesús Matos que en esos momentos salía , nosotros nos quedamos y empezamos a recuperar, en esto veo que Jony se levanta y se dirige al control de carrera y le comenta que abandona, yo callo, me hundo, no me lo creo pero respeto su decisión, sigo allí me acuesto sobre el banco mientras medito lo que voy a hacer,  paso bastante tiempo una hora por lo menos ya no tenía sentido para mí seguir, así que sigo acostado en el banco y pasa el tiempo.

 
Me incorporo y reviso por dentro mi cuerpo, mi mente me dice adelante… por lo menos hasta el GARAÑON, allí iba a ser bien recibido, estaba mi María, a cargo del avituallamiento, así que trece kms. más y p´alante me despido de Jony y p´arriba. Hace frio , subo por la finca de los Moriscos todavía era de noche, se que pronto amanecerá , los recuerdos me vienen, de todo tipo, llegando a la Cruz de Tejeda va amaneciendo, de vez en cuando troto para ganar un poco de tiempo a la vez que me iba encontrando mejor, estoy sólo yo y la montaña, pero me veo bien de piernas y me acuerdo de Jony de lo que hemos pasado la tristeza me embarga y me emociono, me da mucha fuerza el pensarlo, conmigo iba e irá la mitad de Jony. 
EL GARAÑÓN (...María)
Con paso firme hago cumbre y voy entrando por la pista de tierra que me llevará al Garañón. A lo lejos veo un  furgón blanco conocido, como no, Bruno y Noelia que van para el avituallamiento de la Caldera de los Marteles, para a mi altura y me preguntan qué tal..?. Les contesto que de cabeza y piernas bien, pero que dos kms. antes había orinado oscuro y con sangre y me contesta textualmente: “olvídate no sigas más, vas a terminar mal”, me acojono mucho y me da miedo. Sigue su camino, y yo . Estoy en el avituallamiento del Garañón. “ahí está MARIA, un pilar importante para mí”,  y veré si me recupero. Lo tenía claro, que si no es así no voy a salir y esta vez me lo tomo muy en serio, me encuentro a Maria, besos y abrazos y me reservo …lo que hablamos, ja,  ja,  ja,.

Dentro de la cabaña del avituallamiento, cálida y buen ambiente, me encuentro con cuatro corredores entre ellos, Jesús Matos y le comento que voy bien de piernas y con ganas de seguir, lo único que me frena es la preocupación de la orina, decido calmar el cuerpo darle tiempo y si no veo algún indicio de recuperación no voy a salir, o sea, se acaba, hasta aquí llego, me acuesto y mi novia me anima, empiezo a tomar caldito que por cierto estaba muy calentito, que rico, había pasado mucho frio por la Cruz de Tejeda, en esto que llegan los Sanitarios y le pido asistencia, le comento lo que me pasaba, me hacen la prueba del azúcar y la tengo un poco baja, la tensión bien, y no le comento lo de la orina ya que si no, no me hubiesen dejado salir, dejo esta decisión para mí, corro con ello ,así que vuelvo a quedarme sólo en el avituallamiento, los demás corredores han salido y yo allí en las literas militares, con ganas y sin poder.

Pasado un tiempo y a falta de 45´´ de cerrar el control me levanto y voy a orinar parece que orino más claro, y tomo la decisión de seguir, cojo mis cosas y arranco, vuelvo a la carrera,  así que empiezo a caminar puedo correr, pero no lo hago, ya que no quiero agitar mucho el cuerpo, la próxima meta era la Caldera de los Marteles, ahí está Bruno con el avituallamiento, seguro que esperará por mí, por el último. Me llevaba un bote de caldo y me lo tomo caminando me entran ganas de orinar a la altura del refugio “Diaz Beltrana”, es clarita no me lo creo, y me vengo arriba se me sube la autoestima quería correr, pero me reservo, empiezo a estar realmente en CARRERA, un Km. de subida y en el Pico de las Nieves…. Dios mío no me lo creía, divisaba a lo lejos la población de Telde, la Meta estaba cerca, pero primero Valsequillo, me quedaban unos kms. de bajada para llegar a la Caldera de los Marteles y avituallamiento.

CALDERA DE LOS MARTELES
Cuando voy llegando y a unos 200 mts. Veo corriendo hacia mí a recibirme con los brazos abiertos a Bruno y lo veo emocionado No tengo palabras para describir este momento fue uno de los mejores de la carrera, Jó que grande es mi primo, lo aprecio demasiado, ahí siempre, igual e incondicional, me recibe también Noelia, que me comenta que ya tenía otra carita de felicidad y no la que tenía en anteriores encuentros. Me vengo arriba, gano mucha confianza así que bajo el cráter lo subo y me quedan unos 8 kms. de pista, la troto a buen ritmo y me planto en Valsequillo. Llevo tiempo trotando y me veo bien y es desde aquí cuando empiezo a pensar que puedo y voy a llegar a MELENARA,  me lo empiezo a creer y a la vez pienso en todos los kms. de vivencias que quedan atrás. Llego al avituallamiento de Valsequillo, como siempre cálido recibimiento de Carmen Delia los chicos de la Majadilla que me dan muchos ánimos, veo que se encuentra Eolo y otro chico de mi distancia y por supuesto Jesús Matos que como en todos los avituallamientos yo entrando y el saliendo, pero en este, apuro mucho y salgo rápido para cogerlo e ir en compañía de él hasta Melenara, hacemos “negocio” y volvemos a montar una pequeña empresa para terminar la carrera.
VALSEQUILLO
Subimos el Helechal y después comenzamos a bajar el Montañón, una pista de tierra trotando, una bajada técnica que nos saca a San Roque, para afrontar la penúltima cuesta, el tiempo nos acompaña, gracias a Dios, aunque hay zonas en la subida donde el tiempo es bochornoso y nos hace sudar más de la cuenta, en esto llegamos a la Barrera donde tenemos avituallamiento líquido, vamos bien de agua aunque paramos y los chicos de ATLEFULCA global nos ofrecieron un maravilloso cortado, nos despedimos de la gente y continuamos y ya seguro que sí vamos a terminar, nos animamos mucho y entramos en un camino que nos lleva directo a la falda de la montaña Las Palmas que al igual que la anterior cuesta, dosificando subimos y ahora sí vemos Telde claramente y sobre todo Melenara , tocamos madera, madera de la Cruz que la dejamos a la derecha, nos paramos unos segundos damos gracias a Dios y p´abajo, bajada apiconada y desgastada sobre todo por el tránsito de corredores del día de hoy, da gusto bajar por ella, salimos a  Tara, Tres cruces y pisamos por fin el Barranco de Telde y trotando llegamos al Puente de Siete Ojos,… “vaya fiesta tiene el club ATLEFULCA que fielmente y con mucha alegría lleva el avituallamiento”, nos comentan que llevamos delante tres o cuatro corredores de nuestra distancia y que podíamos adelantarlos.


LA GARITA
Nos fijamos como vamos de agua, recargamos y sin más nos ponemos en marcha para pasar 4  kms. de terreno llano de barranco que nos llevaría al centro comercial las Terrazas, por el camino adelantamos a los corredores, llevaban problemas, calambres, agotamiento, en fin esto funciona así, es parte del juego. Yo me encuentro fuerte, bien y con muchas ganas de llegar. Salimos por detrás del Centro comercial Alcampo, avenida y ya estamos en la Garita, corremos, caminamos un poco.
Jesús comienza a mirar de vez en cuando para atrás, no quiere sorpresas, yo le digo que tranquilo que es imposible que nadie nos adelante con nuestro ritmo. Nunca jamás pensé que iba a estar así a esa altura de la carrera, ni en mis mejores sueños, por fin cogemos el paseo de la Garita hacia Melenara, paseo de toboganes y ya en Taliarte veo a Jesús colocándose la ropa secándose el sudor, ja, ja,ja… pues eso, “acicalandose” para la entrada en Meta, hago lo mismo nos colocamos el dorsal bien y bajamos las escaleras que nos lleva a Melenara  a 150 mts. En los restaurantes del paseo hay gente que se levanta de las mesas aplauden y a chocarla con nosotros, Jesús y yo lado a lado “codo a codo” nos acercamos al arco de Meta, pasan muchas cosas por mi cabeza, muchos recuerdos, me acuerdo de Jony, entrenamientos, duras noches, entrenos con calor, madrugones, dolores y
un largo, etc., etc.,



La gente nos recibe, muchos conocidos y entre aplausos fotos y gritos de campeones entramos, al fondo veo a María, corro hacia ella sin pensarlo me emociono, vaaaáleeeeeee, lo digo; lloramos como niños, este reto lo he conseguido GRACIAS A ELLA.

Reflexión: Puede que, en ocasiones, nuestras piernas no den más y es más nuestra fuerza de voluntad, nuestra fuerza mental la que nos haga conseguir nuestro objetivo. La autoconfianza se regula mediante dos variables psicológicas: LA MOTIVACIÓN Y EL ESTRÉS.




OBJETIVO CONSEGUIDO, a por el siguiente…!

Agradecimientos a todos los que de una forma o otra me habéis apoyado, agradecimientos a algunas personas por estar ahí, en el momento preciso, cuando más se les necesita. Agradecimientos a los que me habéis demostrado su cariño, porque yo también les quiero…!


JAVIER SANTANA SANTANA